Un nefasto tercer cuarto sepulta las opciones de victoria del Baloncesto Talavera en Zamora

Con amargo sabor despide este 2022 y también la primera vuelta de competición el Baloncesto Talavera en un encuentro en el que estuvo firme durante los dos primeros cuartos, apoyándose en el gran acierto exterior de sus jugadores ante el poderío en la pintura de su oponente, y que se quedó sin capacidad de reacción tras el descanso protagonizando un parcial de 28-5 que acabó siendo la clave para que Zamora Enamora se llevara la victoria y además claramente, por 37 puntos de diferencia (92-55).

Duelo de necesidades para dos equipos de la zona baja de este Grupo ‘Oeste’ de LEB Plata y también de dos equipos que llegaban con sus planteles algo mermados para este envite. Quizá más echó de menos el conjunto cerámico a su torre Stefan Andrejevic ante un conjunto zamorano que basó su primera parte del encuentro en el poderío interior que convertía a Evan Yates como el auténtico dominador de la pintura.

La corpulencia del norteamericano fue un quebradero de cabeza para un conjunto cerámico al que no sólo le costaba defender en su bombilla, sino también atacar la rival. Eso le hizo buscar el perímetro y ahí le sacó gran petróleo. De hecho de los 14 puntos anotados en estos diez minutos iniciales eran 12 de ellos los que llegaban desde el triple con 100% de acierto de un Aarón Ganal que con su canasta llevaba el 16-14 con el que se cerraba este primer periodo inicial.

De tres también daba la bienvenida al segundo cuarto el conjunto cerámico y la canasta desde la esquina de Castillo ponía un 16-17 que suponía la primera ventaja visitante en la cita. Poco duró la alegría a los de Ricardo Úriz, quien además en una acción convertida por Yates resultaba perjudicado Peris con una mala caída que lo dejaba fuera de juego ya para todo el encuentro, si bien reingresaría minutos más tarde, pero se le notaba que estaba tocado.

Pese a este lastre y que además Cooper ya estaba con dos faltas en su casillero, los de Talavera de la Reina revirtieron una situación que se le ponía complicado con un 24-19 y puntos a la carrera para los de Saulo Hernández. A base de triples, como no podía ser de otra manera, empezó a llegar la reacción cerámica y de hecho llegó a alcanzar de nuevo ventaja en el luminoso logrando los tres puntos de distancia (32-35) con un Castillo que estaba ‘on fire’.

La lástima es que en los compases finales de cuarto Baloncesto Talavera no supo jugar con su ventaja ante un rival que siguió percutiendo la zona y con sendos 2+1 convertidos tanto por Traoré como por Naspler recuperaba la diferencia perdida, igualando el cuarto (22-22) y logrando de esta manera una renta de dos puntos al descanso (38-36).

A la vuelta del tiempo de descanso fue cuando llegó la hecatombe para los de Talavera de la Reina. Y es que Zamora Enamora, que hasta el momento había decidido jugárselo todo al poderío de sus pívots desechando el tiro exterior (contaba con un nulo acierto hasta el momento de 0/6), comenzó a ver cómo precisamente desde el 6’75 iba a estar la clave para llevarse la victoria.

Y ahí apareció un Erikas Kalinicenko casi inédito hasta el momento (apenas había hecho dos puntos en 17 minutos), que empezó a calibrar su muñeca y de qué manera, pues lograría acabar el periodo con 17 puntos, habiendo anotado cinco triples. Al festival también se sumaba Pablo Marín con otros dos triples y otro más de Toni Naspler.

Por el camino tortuoso de este tercer cuarto para olvidar de los de Talavera de la Reina apenas cinco puntos anotados (una de dos de Ganal y tres tiros libres de Peris y de Archer), más de una decena de tiros errados, las mismas pérdidas casi que durante los dos cuartos anteriores y todo un sinfín de despropósitos que hacían a los locales coger los 25 puntos de ventaja que dejaban la cita vista para sentencia (66-41).

Y cierto es que todavía quedaba un mundo, diez minutos, pero ya los visitantes habían tirado la toalla en un partido en el que estaba roto y donde el canterano Pablo Martín le puso desparpajo y ganas aprovechando este periodo para anotar siete puntos y contribuir a que la sangría fuera la menor posible, siendo esta finalmente de 37 puntos.

De esta manera, con el 92-55 era el resultado con el que se llegaba al final del envite en el Pabellón ‘Ángel Nieto’, el último de este 2022 para un Baloncesto Talavera que espera que este 2023 le traiga esa ansiada primera victoria lejos de casa y el despegue en una competición que empieza a romperse también por abajo y en el que toca apretar para evitar esos puestos peligrosos en los que se encuentra el equipo.